La alemana Adidas publicó ayer al cierre del mercado europeo unos resulados preliminares del 2º trimestre. Resultados que han sorprendido gratamente y en los que además han mejorado las pesimistas previsiones iniciales para el resto del año.
Sin tener en cuenta el efecto divisa las ventas se mantuvieron planas respecto al año anterior, mientras que teniendo en cuenta la divisa el descenso fue de un 5%. El margen bruto mejoró 60 p.b. básicos hasta el 50.90% mientras que el margen operativo cayó hasta el 3.3% frente al 7% de 2022.
Uno de las principales incertidumbres de la compañía este año era que iba a ocurrir con el inventario de la línea Yeezy tras el divorcio de la marca con Kaney West. En mayo ya ha podido empezar a desprenderse de una parte relevante de este inventario lo que ha impactado de forma positiva en los resultados. En cualquier caso, el resto del negocio de la compañía también ha tenido un comportamiento algo mejor a lo esperado.
Gracias a lo anterior la compañía ha mejorado las guías para el conjunto del año. A divisa constante se espera que los ingresos caigan a alrededor del 5% cuando anteriormente se esperaba una caída cercana al 10%. En cuanto al impacto del inventario de Yeezy, de unas pérdidas de 700 millones, se espera que se reduzcan a una pérdida operativa de alrededor de 450 millones €.
Esto ha impulsado en el día de hoy la cotización de Adidas que sube alrededor del 5%. Adidas forma parte de la cartera de Gesem W-Health & Sports desde comienzos de julio con un peso del 4%.