El miércoles conocimos los resultados empresariales de una de nuestras principales apuestas, Microsoft. La compañía estadounidense ha sonado mucho en los últimos meses tras la adquisición de Open AI, la empresa desarrolladora del ya tan famoso ChatGPT. Además, la empresa ha sido muy inteligente al anunciar futuras integraciones de todas las IAs desarrolladas por Open AI en su ecosistema de Office. Todo esto ha creado unas expectativas en los inversores que se confirmaron el miércoles con la presentación de resultados. Microsoft no solo batió las expectativas tanto de beneficios como de ingresos, sino que su principal fuente de crecimiento vino por la parte del Cloud. En palabras del propio CEO, Satya Nadella, estamos empezando una “nueva era de la computación” y Microsoft cuenta con la tecnología necesaria para seguir liderando en esta nueva era. Analizando cada uno de los segmentos vemos cómo efectivamente el segmento que sigue liderando el crecimiento de la compañía es el de cloud, que contiene todos aquellos servicios relacionados con Azure y las integraciones con el resto del ecosistema de Office. Concretamente, este segmento ha crecido un 16%, mientras que su principal segmento, el que incluye bienes y servicios más comerciales como el paquete Office, ha crecido un 11% y el segmento relacionado con el gaming u ordenadores personales lo ha hecho a una tasa del 9%.
No obstante, el motivo principal por el cual decidimos introducir esta empresa en nuestra cartera de Gesem W-Health & Sport es por el segmento de gaming, especialmente tras la adquisición de Activision y, acompañando a estos espectaculares resultados tenemos la noticia de que Reino Unido parece haber bloqueado el acuerdo de adquisición. La “buena” noticia es que este bloqueo se ha llevado a cabo porque supuestamente el CMA (la autoridad de competencia y mercados de Reino Unido) considera que Microsoft ya tiene una fuerte posición en el sector del gaming. Y es que la compañía actualmente controla, según esta autoridad, el 60% del mercado de gaming en la nube. La mala es que la integración de Activision en Microsoft iba a suponer una serie de sinergias que eleven aún más ese poder de mercado en un sector en crecimiento. Veremos a ver en qué queda esto ya que Activision ya ha declarado que recurrirá en defensa del acuerdo. En cualquier caso, nuestra posición en la empresa seguirá siendo la misma, especialmente después de estos espectaculares resultados.